Los inicios del ecologismo y su evolución
Un memorándum de 1952, entregado en mano al dictador, Jefe del Estado, Francisco Franco, para impedir la transformación de las marismas del Guadalquivir en un cultivo de eucaliptos que produjera pasta de papel, puede considerarse el arranque del ecologismo actual.
Fue redactado por el catedrático de zoología Francisco Bernis, a petición de los bodegueros gaditanos Manuel y Mauricio González, que en 1940 habían comprado parte del Coto de Doñana.
Dos años más tarde Bernis fundó con José Antonio Valverde y media docena de naturalistas, la Sociedad Española de Ornitología, SEO. El acta fundacional fue firmada por setenta personas, entre ellas Félix Rodríguez de la Fuente. Estos pioneros fundaron en 1968 la asociación para la defensa de la naturaleza, ADENA, sección española del Fondo Mundial para la Vida Salvaje, WWF.
La labor de comunicación desarrollada por Rodríguez de la Fuente en esos años impulsó la creación de decenas de entidades ecologistas por toda España. Nació así el movimiento social que en la década de 1980 forzó a los políticos y a los funcionarios de la Administración Pública, así como a las empresas, a sumarse a la conservación de la naturaleza. Pero el éxito desvirtuó los conceptos iniciales. En este tomo se plantea la refundación del ecologismo de modo que pueda retomar su capacidad de alcanzar el objetivo de recuperar la vida salvaje e infundir el vitalismo que caracterizó a los pioneros que en una situación de caos y desventaja no se amilanaron ante el reto de cambiar la mentalidad de sus contemporáneos.