El Cárabo, la Hulotte en España
En 1982, escribimos desde España a Pierre Déom solicitándole traducir y publicar su revista La Hulotte del francés al castellano. Ignorando que algunas grandes editoriales habían intentado en vano obtener los derechos de impresión de La Hulotte. Enviarle con la carta los primeros números de la revista Quercus, como muestra de la labor editorial que acabábamos de sacar en España desde diciembre de 1981, sin más medios que la ilusión y el entusiasmo, debió convencerle, porque Déom nos envió la colección de La Hulotte, aceptando se hiciera la versión en castellano con una condición: “que quienes se lo proponían no cambiaran nunca la forma de ser que deducía de la carta y de aquellos primeros Quercus”.
Tres meses adicionales de trabajo paciente y laborioso le lleva a la periodista Teresa Vicetto traducir, editar y distribuir cada cuaderno de La Hulotte al castellano. También en solitario, desde hace 40 años. La edita en España bajo el nombre de El Cárabo. Consulta fuentes y expertos, adapta datos, censos, giros del leguaje y experiencias a la biogeografía ibérica. El número 95 español verá la luz en octubre de 2022, acercándose lentamente al número 112 que Déom llevará para entonces publicado en francés. Tanto su versión original en francés como la traducida al español solo se pueden adquirir por suscripción.
En el mundo francófono, Pierre Déom es un influencer, una gloria nacional, aclamada y apreciada. En el año 2001 la Academia Francesa, acostumbrada a reconocer lo sobresaliente, le condecoró con el galardón Jacques Lacroix por su contribución a la lengua y la cultura. De carácter tímido y discreto, es casi imposible encontrarle en ningún acto público, o fuera de sus circuitos privados, celosamente guardados por su equipo, formado por una docena de personas, casi todo mujeres, encabezado por su esposa, Christine, que se encarga de velar por los cuatros miembros de la familia, incrementada en la década de 1980 al nacer los dos hijos de esta pareja, y por dirigir la editorial que produce La Hulotte.
Al margen del contenido de los cuadernos, que cautiva al que lo lee, su cifra de suscriptores despierta la curiosidad en los medios de comunicación convencionales. Algunas de las grandes editoriales fueron a negociar con Déom para comprarle los derechos y “lanzar aun más la obra”, por ejemplo “metiéndole color”, ya que La Hulotte / El Cárabo se sigue haciendo en riguroso dibujo a plumilla, en blanco y negro. No hubo manera. Ninguna cifra millonaria puede perturbar la paz de Pierre. A todos dio calabazas. No necesita más proyección, ni más dinero, ni colorines. Su obra es la que es y, sobre todo, aprecia la manera de cómo la hace: a su aire, sin prisas, sin jefes, sin socios, sin accionistas, sin nadie que le perturbe.
Queda la interrogante de cuál será el futuro de esa revista. Lo mismo ocurre con su versión española, cuya editora también realiza todas las funciones en solitario desde que a la edad de 26 años inició esa labor en 1982. En una entrevista publicada el 18 noviembre de 2020 a raíz de que la región del Grand Est de Francia le concediera el “Premio al Compromiso Democrático”, la periodista preguntó a Pierre por la continuidad de su publicación y escribió: “Una sucesión abierta. Pasan los años, y aunque el autor, ciertamente, no piensa en jubilarse, no descarta la posibilidad de transmitir La Hulotte algún día. “No estoy cerrado a una sucesión”, explica, “pero la oportunidad nunca se ha presentado”. Se puede, pues, pensar que de hecho sería capaz de acoger a un candidato para que tome el relevo”, concluye la entrevistadora.
Sin embargo, en unas declaraciones anteriores, Déom daba por hecho que La Hulotte moriría con él. Lo mismo piensa Teresa Vicetto de El Cárabo. Bien es verdad que sus casos son opuestos. Encontrar sucesor cuando decenas de miles de personas aprecian tu obra, como le ocurre a La Hulotte en Francia, debiera ser fácil. Lo difícil es perseverar en una tarea, como le pasa a la versión española, solo por considerar que con que la reconozca una minoría, dado que en ella hay muchos educadores que propagan los contenidos a sus alumnos, ya compensa el esfuerzo. La versión en castellano tiene un escaso número de suscriptores –algo que bien puedes ayudar a subsanar, abonándote a esta maravilla hoy mismo– y ni el autor, ni la traductora y editora en España han percibido beneficio alguno por su labor en estos cuarenta años que llevan trabajando para poner esta joya de la educación ambiental a disposición de los hispanoblantes.
Relanzar El Cárabo español
Una veintena de investigadores, profesores, intelectuales, dirigentes ecologistas y periodistas españoles han firmado cartas de apoyo orientadas a conseguir recursos para que la revista El Cárabo sea difundida en España. Son un selecto grupo que representan el compromiso con la causa de la naturaleza que tienen los lectores de esta publicación y una muestra del aprecio que alcanza la obra de Pierre Déom y la labor de su traducción y adaptación a la Península ibérica realizada por Teresa Vicetto. Encabezan una lista de apoyos a la que puedes sumarte en el enlace al final de este texto, firmando tú también.
Con motivo de 40º Aniversario de la revista El Cárabo se convoca un concurso de dibujos a plumilla que ilustren 100 especies de árboles autóctonos de la flora ibérica, para publicar un catálogo con los dibujos ganadores, a imprimir en 2028, con motivo del 100º aniversario del nacimiento de la persona que despertó el interés por la naturaleza en España, Félix Rodríguez de la Fuente. Se quiere coordinar una acción para que hasta 2027 se planten en 100 colegios de las 100 ciudades más habitadas de España, un ejemplar de cada una de las 100 especies de árboles, de modo que en los centros los escolares hagan en 2028 un homenaje al precursor de la conciencia ambiental.
Afortunadamente, cada seis o doce meses, Déom comparte con los que le leen desde ese mundo urbano, que él nunca pisa, sus desvelos y descubrimientos. Gracias a él nos enteramos de que la naturaleza palpita a nuestro lado, muy cerca, y que descubrirla no requiere grandes desplazamientos a inaccesibles santuarios.
Ahí, a las afueras del pueblo, o en el parque de tu ciudad, están ocurriendo –ahora mismo– procesos ecológicos fantásticos; prodigiosos y espectaculares acontecimientos naturales. Sólo es necesario aprender a verlos, entenderlos y disfrutarlos. Para ello tenemos en los cuadernos de La Hulotte/El Cárabo una fuente inagotable de sugerencias, pistas y datos sobre la naturaleza cercana y accesible.
Dirección de contacto de la revista El Cárabo: www.elcarabo.com
c/ La Pedriza, 1 · 28002 Madrid · Correo electrónico: revista@elcarabo.com
Dirección de contacto de la revista La Hulotte: www.lahulotte.fr
Campaña–homenaje de los lectores de El Cárabo en el 100º aniversario del nacimiento de Félix Rodríguez de la Fuente, dibujando y plantando 100 especies de árboles y arbustos de la flora ibérica: https://centenariofelix.laestirpedeloslibres.club